Manuel Carrasco encontró una historia en la calle que lo motivó para crear esta canción, una inmigrante que tenía a su hijo muy lejos de ella por su situación económica.
Es triste, que por problemas económicos o por la inmadurez de algunas parejas que deciden separarse, los niños y los padres tengan que mantenerse en la distancia. De igual manera, los que hemos tenido la suerte haber sido padres y cuando por circunstancias notamos que la separación de nuestros hijos es algo mas prolongada de lo que debería, esta canción consigue llegar a esa parte de nosotros que nos hace sentir incompletos.
Asuntos Sociales debería tomar seriamente cartas en el asunto con todos los padres y madres irresponsables que después de una separación utilizan a sus hijos como moneda de cambio.
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